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Intervención en alimentación y nutrición para mineros con factores de riesgo cardiovascular, basada en la investigación formativa

Authors:

Abstract

We designed and implemented an intervention to improve the diet of 94 miners with cardiovascular risk of a mining company. The diagnosis included a qualitative study of the desires, motivations and barriers that workers have to lead a healthy life, a survey of food consumption and checking the institutional food service. Anthropometric and biochemical data were provided by the company. Based on the results, the intervention included improving the supply of healthy foods and conducting the communication campaign "Minero 100% Filete", workshops and nutritional counseling for them and their families. After 8 months of intervention we found a significant increase in the consumption of fruits and vegetables and a decreased consumption of fried, cured and red meats. There was no significant change in BMI. However, there were significant decreases in systolic blood pressure, blood glucose levels, triglycerides and an increase in HDL cholesterol. Although the program was well received by the workers, it is acknowledged that there are significant adverse factors which merit improvement.
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INTRODUCCIÓN
Los resultados de la II Encuesta Nacional de Salud, realiza-
da por el Ministerio de Salud de Chile en los años 2009-2010,
mostraron que la prevalencia de obesidad alcanzaba al 20,5%
y el sobrepeso al 45,3% en los hombres mayores de 15 años,
en los que además se observaron altos niveles de sedentaris-
mo (84%). A esto se sumaban prevalencias de hipertensión
arterial del 28,7%, diabetes (8,4%), colesterol elevado (39%),
colesterol HDL bajo 40 mg/dL (37,6%) y triglicéridos elevados
(35,6%) (1).
Una de las estrategias para abordar la prevalencia de
enfermedades crónicas no transmisibles (ENT) propuesta por
la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha sido la pro-
moción de salud en los lugares de trabajo, para bene ciar a
los trabajadores y generar impactos positivos en las empresas
(2,3). Intervenciones que propician la alimentación adecuada
y la práctica regular de actividad física en trabajadores se han
asociado al incremento de hasta 20% en los niveles de pro-
ductividad y reducción del ausentismo laboral (4-10).
Goetzel y cols. (11) proponen seis elementos caracterís-
Rev Chil Nutr Vol. 40, Nº4, Diciembre 2013
Intervención en alimentación y nutrición para
mineros con factores de riesgo cardiovascular,
basada en la investigación formativa
Food and nutrition intervention for miners
with cardiovascular risk factors,
based on formative research
Astrid Caichac H. (1)
Fernanda Mediano S. (1)
Gonzalo Blanco P. (2)
Lydia Lera M. (1)
Carmen Gloria Yáñez G. (1)
Fernando Vio del R. (1)
Sonia Olivares C. (1)
1Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos (INTA), Universidad de Chile,
Santiago, Chile.
2Superintendente de Salud Ocupacional, Gerencia de Seguridad y Salud Ocupa-
cional de AngloAmerican, Santiago, Chile.
Dirigir la correspondencia a:
Profesora
Sonia Olivares
INTA, Universidad de Chile
El Líbano 5524, Comuna de Macul, Santiago
Teléfonos: 2 9781437 – 09-7892048
e-mail: solivare@inta.uchile.cl
Este trabajo fue recibido el 2 de Julio de 2013
y aceptado para ser publicado el 30 de Octubre de 2013.
ABSTRACT
We designed and implemented an intervention to improve the
diet of 94 miners with cardiovascular risk of a mining company.
The diagnosis included a qualitative study of the desires, moti-
vations and barriers that workers have to lead a healthy life, a
survey of food consumption and checking the institutional food
service. Anthropometric and biochemical data were provided
by the company. Based on the results, the intervention included
improving the supply of healthy foods and conducting the com-
munication campaign “Minero 100% Filete”, workshops and
nutritional counseling for them and their families. After 8 months
of intervention we found a signifi cant increase in the consumption
of fruits and vegetables and a decreased consumption of fried,
cured and red meats. There was no signifi cant change in BMI.
However, there were signifi cant decreases in systolic blood
pressure, blood glucose levels, triglycerides and an increase in
HDL cholesterol. Although the program was well received by
the workers, it is acknowledged that there are signifi cant adverse
factors which merit improvement.
Key words: cardiovascular risks factors, food consumption, for-
mative research, communicational campaign, miners.
ticos de los programas exitosos de promoción de salud en el
trabajo: compromiso organizacional, intervenciones basadas en
la evidencia, incentivos para que los trabajadores participen,
implementación, seguimiento y evaluaciones efectivas.
La mayoría de los programas utilizan estrategias de in-
formación y comunicación en salud y técnicas conductuales
para generar cambios en la dieta y la actividad física (12).
Son escasas las que han modi cado el ambiente de trabajo,
como la cafetería y los servicios de actividad física (13,14),
aun cuando existe evidencia sobre la necesidad de utilizar el
modelo ecológico social en este tipo de intervenciones, que
considera la interacción entre los factores ambientales y las
conductas de las personas, cuando se desea lograr cambios
en el estado de salud de los trabajadores (15).
La evidencia reportada en meta-análisis y revisiones
sistemáticas sobre las intervenciones para promover la salud
en los lugares de trabajo, dan cuenta de un impacto modesto
en la dieta, actividad física, en la reducción del peso de los
trabajadores y en resultados de salud (5-8).
Se ha planteado que cuando el trabajo se realiza en
337
alturas superiores a los 3.000 m sobre el nivel del mar, como
ocurre con frecuencia en la minería, aumentan los riesgos
para los trabajadores que tienen hipertensión arterial, obe-
sidad mórbida u otros factores de riesgo cardiovascular, lo
que hace necesario realizar acciones efectivas para prevenir
complicaciones (16-18).
En una reciente revisión de los resultados de programas
de promoción de salud en el trabajo, Kahn-Marshall y Gallant
(19) dan cuenta de las limitaciones y di cultades que existen
para realizar investigaciones rigurosas en el contexto laboral.
Señalan que si bien los resultados encontrados mostraban
una efectividad moderada en las intervenciones realizadas,
fueron mejores en aquellas que combinaban cambios en las
políticas y modi caban el ambiente, además de intervenir en
los factores personales para aumentar el consumo de frutas y
verduras, reducir el consumo de grasas y aumentar la actividad
física de los trabajadores.
Tomando en cuenta las di cultades reportadas por la
literatura para generar impacto en los cambios de conducta
y resultados en salud, los países desarrollados están utili-
zando estrategias de marketing social, entendido como el
uso de los principios y técnicas del marketing para lograr
que una audiencia objetivo voluntariamente acepte, recha-
ce o abandone una conducta, para su bene cio personal y
el de la sociedad (20), el cual ha demostrado ser efectivo
en programas de prevención del consumo de tabaco (21);
lactancia materna (22) y asistencia a control de salud en
hombres (23), entre otros.
Uno de los elementos distintivos del marketing social es
la investigación formativa (24), cuyo objetivo es conocer en
profundidad los deseos, valores, necesidades, motivaciones
y barreras del grupo objetivo, con el n de diseñar interven-
ciones ajustadas a sus características personales y grupales.
La investigación formativa se ha utilizado en el diseño de
programas de marketing social en diversos contextos laborales,
como intervenciones para mejorar la seguridad en trabajadores
agrícolas (25), en el diseño, testeo y comercialización de herra-
mientas para prevenir riesgos químicos (26) y para aumentar
la seguridad en la minería (27).
El objetivo de este estudio fue diseñar un modelo de
intervención en alimentación y nutrición para mineros con
factores de riesgo cardiovascular, basado en los resultados de
la investigación formativa, como fase inicial para la formulación
de un programa de marketing social en salud pública para
trabajadores del sector.
SUJETOS Y MÉTODO
Estudio de 15 meses de duración en trabajadores mineros
con factores de riesgo cardiovascular de Santiago de Chile. En
los primeros 3 meses se realizó un diagnóstico cualitativo (in-
vestigación formativa), institucional, ambiental y se determinó
el consumo de alimentos de cada trabajador. A continuación
se implementó una intervención en alimentación y nutrición
de 8 meses. Los 4 meses restantes fueron utilizados para la
evaluación.
Se trató de una muestra intencionada (28), en la que el
Departamento de Salud Ocupacional de la Compañía Minera
AngloAmerican, solicitó a la Dirección de Asistencia Técnica
del INTA realizar una intervención en alimentación y nutrición
en un grupo de 94 trabajadores con factores de riesgo cardio-
vascular: IMC cercano o superior a 30 kg/m2, hipertensión,
hiperglicemia o lípidos sanguíneos elevados. Los exámenes de
laboratorio de cada uno de los participantes fueron propor-
cionados por la Compañía.
En la tabla 1 se muestran las características de la muestra:
edad promedio de 51 años, de los cuales 78,7% trabajaban a
3.500 m de altura sobre el nivel del mar y 96,4% presentaba
sobrepeso y obesidad. El 51,8% fumaba un promedio de 6,7
cigarrillos al día.
En lo que respecta a la actividad física, 31,9% de los
TABLA 1
Descripción de las características de los 94 trabajadores de sexo masculino participantes en el estudio
Estadísticas descriptivas
Edad (años) promedio ± DE 51± 8.9
Peso (kg) promedio ± DE 89.58 ± 14.36
Talla (m) promedio ± DE 1.71 ± 0.06
Distribución según lugar de trabajo
Los Bronces (3.500 m de altura) n (%) 74 (78.7%)
Las Tórtolas (800 m de altura) n (%) 20 (21.3%)
Actividad física (según tipo de trabajo)
Ligera n (%) 30 (31.9%)
Moderada n (%) 51 (54.3%)
Activa n (%) 13 (13,8%)
Estado nutricional
IMC (kg/m2) promedio ± DE 30.55 ± 4.43
Normal n (%) 9 (9.6%)
Sobrepeso n (%) 35 (37.2%)
Obesidad n (%) 50 (53.2%)
DE: desviación estándar
Intervención en alimentación y nutrición para mineros con factores de riesgo cardiovascular, basada en la investigación formativa
338
trabajadores realizan labores administrativas o de atención de
salud, y pasan largo tiempo frente al computador, por lo que
fueron clasi cados con actividad ligera, cuyo gasto energético
estimado oscilaría entre las 2.200 y 2.400 kcal/día; el 54,3%
incluye a operadores de maquinaria pesada y supervisores o
coordinadores de trabajadores en terreno, quienes fueron cla-
si cados en la categoría moderadamente activos, con un gasto
energético estimado de aproximadamente 2.400 a 2.600 kcal/
día. Sólo el grupo que incluye a mecánicos y eléctricos, quienes
deben utilizar y trasladar instrumentos mecánicos pesados
(13,8%) fue clasi cado como activo, lo que demandaría un
gasto energético de 2.800 a 3.000 kcal/día. Si bien en la mina
existen instalaciones y equipos para la práctica de ejercicios,
sólo 11,6 % de los trabajadores los utilizan.
Descripción de la intervención
Para diseñar una intervención adaptada a las caracterís-
ticas particulares de este grupo de trabajadores se realizaron
cuatro grupos focales, tres con mineros con riesgo cardio-
vascular y uno con mineros sin riesgo cardiovascular que no
participarían en el estudio, para identi car los factores que
afectaban sus conductas alimentarias y de actividad física.
La muestra fue seleccionada por conveniencia, ya que los
grupos se conformaron con trabajadores que pudieran dejar
su puesto de trabajo.
En los 8 meses de duración, el programa contempló
actividades a nivel de las políticas institucionales del servicio
de alimentación, como asesoría en la modi cación del con-
trato de alimentación y capacitación al personal; solicitud
de incluir refrescos libres deazúcar, leche descremada,café
descafeinado y aumentar la disponibilidad de endulzantes sin
calorías,entre otros; una campaña comunicacional que incluyó
a ches, una cartilla educativa, un video que fue expuesto en
el programa La ciencia nos cambia la vida de TVN; consejerías
personalizadas y talleres con la familia, realizados por médico,
nutricionistas y psicóloga del programa.
Estado nutricional e indicadores bioquímicos
Los datos correspondientes a la evaluación del estado
nutricional y los exámenes de laboratorio fueron proporcio-
nados por la Compañía, la que solicita exámenes preventivos
anuales a sus trabajadores. Éstos son realizados por una Clínica
privada del sector oriente de Santiago.
Se utilizó el índice de masa corporal (kg/m2) y los cri-
terios de la OMS para clasi car el estado nutricional de los
trabajadores: peso normal IMC ³ 18.5 a 24.9; sobrepeso IMC
de 25.0 a 29.9 y obesidad IMC ³ 30 (29).
Los valores de referencia utilizados por el laboratorio de
la Clínica para los distintos exámenes son: presión sistólica
<130-140 mm Hg; presión diastólica <85-90 mm Hg; glicemia
70-<100 mg/dl; colesterol total: deseable <200, límite alto
200-239 mg/dl, alto >240 mg/dl, colesterol HDL bajo <40
mg/dl; colesterol LDL: óptimo <100 mg/dl, cercano a óptimo
100-129 mg/dl, límite alto 130-159 mg/dl, alto 160 mg/dl;
triglicéridos: óptimo < 150 mg/dl, límite alto 150-199 mg/
dl, alto 200 mg/dl.
Consumo de alimentos
Para determinar los hábitos de consumo de algunos
alimentos saludables y de aportadores de nutrientes críticos
en los trabajadores del estudio, se aplicó una encuesta de
frecuencia de consumo cuanti cada validada en estudios
previos (30). Las encuestas fueron aplicadas por nutricionistas
entrenadas y estandarizadas.
Características del ambiente
Con el n de determinar si las características del ambiente
en el que trabajaban los mineros podían facilitar u obstaculizar
el cambio de conducta, se analizó el aporte nutricional de la
alimentación institucional, proporcionado por una empresa
externa a la Compañía. Se observó un aporte excesivo de ca-
lorías y nutrientes en relación a las necesidades nutricionales
de los trabajadores y las recomendaciones internacionales
vigentes (31).
Existen 2 tipos de jornadas según área de trabajo: sistema
de turno 9x3 días (jornada completa) y horario administrativo
de 8 a 17 h. En un día de jornada completa, los trabajadores
reciben desayuno, colación o choca, almuerzo, colación,
once, cena. Asumiendo que el trabajador consumiera todos
los alimentos que se le entregan, su consumo alcanzaría a las
6.378 kcal/día, lo que representa el 265% de sus necesidades
(requerimiento promedio de 2.400 kcal); 262 g de grasas
totales (393% de lo recomendado), 414 mg de colesterol
(141% de lo recomendado) y 7.852 mg de sodio (392,6% de
lo recomendado). Gran parte del aporte calórico está deter-
minado por la colación recibida a media mañana, consistente
en 2 latas de bebidas gaseosas, té o café a disposición con
azúcar o endulzante, 2 sándwiches en pan marraqueta o
hallulla (de aproximadamente 100 g), 1 paquete grande de
galletas y 1 postre intercambiable por 1 chocolate de 40 g,
con un aporte energético aproximado de 1.800 kcal. Muchos
de estos productos son llevados al hogar.
Respecto a los trabajadores que se desempeñan en
horarios administrativos, no reciben la misma choca a media
mañana, pero a la hora de salida se les entrega una colación
consistente en bebida gaseosa, jugo, leche, pastel y un pa-
quete de galletas.
En lo que respecta a la actividad física, la empresa cuenta
con un gimnasio, el que está a cargo de un profesor de edu-
cación física. Para acceder al servicio los trabajadores deben
presentar un test de esfuerzo aprobado previamente.
Análisis estadístico de los datos
Se realizó un análisis descriptivo de todas las variables
involucradas en el estudio (sociodemográ cas, antropométri-
cas, de consumo de alimentos y exámenes de laboratorio), las
variables continuas fueron expresadas como promedio ± DE
y las variables cualitativas en porcentajes. Las comparaciones
fueron realizadas con la prueba t de Student para muestras
pareadas.
Se jó un nivel de signi cación de 0.05 y los análisis
fueron realizados en STATA 12.0. (32).
RESULTADOS
Del estudio cualitativo
Respecto a los factores asociados a la obesidad y riesgo
cardiovascular, si bien se observó baja percepción de riesgo
y responsabilidad por la propia salud, los mineros señalaron
consecuencias negativas asociadas a sus problemas de salud,
como menor desempeño físico e insatisfacción con la imagen
corporal.
Las principales barreras descritas frente a las conductas
inapropiadas en alimentación y actividad física fueron: ansie-
dad, falta de autocontrol, de apoyo familiar y en el trabajo,
di cultades para realizar ejercicio en la jornada laboral y falta
de opciones saludables y “competitivas” en la oferta de ali-
mentación de la empresa concesionaria.
Los principales facilitadores fueron su propio compromiso
y voluntad, el apoyo familiar y condiciones laborales favorables
Caichac A. y cols.
339
al cambio de hábitos, como la incorporación de alimentos y co-
midas saludables y un mejor uso del gimnasio de la compañía.
Los bene cios atribuidos a un buen estado de salud,
control del peso y estar en forma, fueron: verse bien, tener una
mejor condición física, sentirse bien consigo mismos, mejorar
su sexualidad, ser un modelo para su familia y mantener su
puesto de trabajo a través del tiempo. Al consultar sobre qué
tipo de apoyo podría facilitar el cambio de hábitos, nombra-
ron el desarrollo de habilidades personales (autoe cacia),
apoyo familiar y modi caciones en el ambiente laboral, que
les permitieran afrontar las barreras percibidas y potenciar las
conductas de salud.
A partir de estos resultados se realizó un programa de
intervención basado en el modelo ecológico social (15),
para impactar a distintos niveles: políticas institucionales de
alimentación; campaña comunicacional en la empresa; con-
sejería nutricional individual para aumentar conocimientos,
desarrollar habilidades y mejorar la percepción de autoe cacia
y un taller educativo para las familias, con el n de potenciar
el apoyo familiar al cambio de hábitos de los mineros.
Basados en los bene cios asociados a mejores conductas
de salud, tales como “verse y sentirse bien”, se estableció el
nombre del programa: “Minero 100% Filete”, modismo chile-
no que hace referencia a: “persona muy agraciada, sea hombre
o mujer” y/o “cosa, artículo o producto de primera calidad”,
con el n de abarcar tanto los bene cios de atractivo físico,
como de rendimiento físico, laboral y sexual.
La participación de los mineros en las distintas actividades
fue variable, alcanzando a un 50% en las consejerías (2 de 4)
y al 30% en los talleres, debido a los horarios de trabajo. El
taller con las familias tuvo una participación del 80%.
Consumo de alimentos
En la tabla 2 se observa el consumo de alimentos de los
trabajadores, expresado en gramos/promedio/día al inicio y
nal de la intervención. En general, los datos muestran un
consumo muy inferior a los alimentos y bebidas proporcio-
nados por la empresa. Al nalizar la intervención se observó
un aumento signi cativo en el consumo promedio de frutas
y verduras y una disminución signi cativa en el consumo de
frituras, cecinas y carnes rojas.
Al determinar el porcentaje de trabajadores que logró
cambios en su conducta alimentaria, se observó que el 50%
aumentó su consumo de frutas y verduras, hasta llegar al
menos a 2 porciones de frutas y 1 de verduras al día; el por-
centaje de trabajadores que consumían al menos 2 lácteos
descremados diariamente aumentó del 10% al 43% y el 50%
de los trabajadores logró disminuir su consumo de bebidas
gaseosas azucaradas.
Estado nutricional e indicadores bioquímicos
Es preciso señalar que al término de la intervención,
sólo se pudo disponer de los resultados de los exámenes de
glicemia, triglicéridos y colesterol de 61 de los 94 trabajadores
intervenidos. Si bien los resultados de estos exámenes son
exigidos por la Compañía, el plazo autorizado para entregarlos
fue mayor al establecido en este estudio. Los trabajadores in-
dicaron como barrera para cumplir con este requisito, la gran
distancia entre la clínica y su lugar de residencia, ya que deben
concurrir a la misma a realizarse los exámenes en sus días libres.
A pesar de la elevada prevalencia de sobrepeso y obesi-
dad, el IMC promedio sólo se redujo en 0,4 puntos (NS). En la
tabla 3 se observa que en promedio, la presión arterial sistólica
disminuyó signi cativamente de 127 a 122 mm Hg (p<0,05),
la glicemia de 102 a 98 mg/dl (p<0,05) y los triglicéridos de
199 a 166 mg/dl (p<0,01). El colesterol HDL aumentó de 40.9
a 43.2 mg/dl (p<0,01).
Se observó que el 64% de los trabajadores que presenta-
ron niveles bajos de colesterol HDL al inicio, lograron aumen-
tarlo y el 32% logró llegar al rango normal. El 58% mejoró su
nivel de colesterol LDL y el 30% lo normalizó. El 79% mejoró
sus niveles de triglicéridos y el 30% logró valores dentro del
rango normal. El 50% de los funcionarios que presentaban
valores altos de presión arterial logró normalizarlos.
DISCUSIÓN
En este estudio se observó una reducción no signi cativa
del IMC, semejante a la baja reportada por Anderson y Cols.
TABLA 2
Consumo de alimentos inicial y nal de 94 trabajadores de AngloAmerican
ALIMENTOS 2011 2012
Promedio ± DE Promedio ± DE
Lácteos (g/día) 150.1 ± 140.4 193 ± 165.1
Frutas y verduras (g/día) 207.3 ± 124.5 288.7 ± 165.2*
Pescado (g/día) 26.2 ± 20.9 19.1 ± 16.3
Carnes rojas (g/día) 74,7 ± 60.3 47.8 ± 53.8**
Pan (g/día) 202.9 ± 108.4 191.9 ± 82.7
Frituras (g/día) 28.8 ± 41.3 3.9 ± 8.3**
Cecinas (g/día) 20.6 ± 28.4 9.8 ± 16.4**
Margarina, mayonesa (g/día) 1.6 ± 6.9 4.1 ± 5.3
Azúcar (g/día) 6.7 ± 11.8 7.1 ± 16.2
Bocadillos dulce (g/día) 17.7 ± 31.3 7.4 ± 16.2
Bebidas azucaradas (ml/día) 301.0 ± 375.8 295.6 ± 290.0
Bebidas alcohólicas (ml/día) 68.0 ± 109.6 35.6 ± 53.3
t-Student para muestras pareadas: *p<0,05 **p<0,01
DE: desviación estándar
Intervención en alimentación y nutrición para mineros con factores de riesgo cardiovascular, basada en la investigación formativa
340
(6) en una revisión sistemática de seis programas de salud en
el lugar de trabajo, que no mostraron diferencias signi cativas
del IMC entre el grupo intervenido y control a los 6 y 12 meses
de seguimiento.
Benedict & Arterburn (5), en una revisión sistemática
sobre la efectividad de los programas para perder peso en el
lugar de trabajo, encontraron que los que tenían una duración
de 8 semanas a 18 meses, centrados en educación y consejería
sobre dieta y actividad física, obtenían resultados modestos,
con una pérdida entre 1 a 6,3 kg en el grupo intervenido,
la que en el grupo control fue de 0,7 kg hasta ganar 0,5 kg.
También encontraron una modesta reducción en los lípidos
sanguíneos y la presión arterial.
En este estudio, se observaron cambios signi cativos en
la presión arterial sistólica, la disminución de los triglicéridos
y el aumento del colesterol HDL, semejantes a los reportados
por Nilsson y Cols. (33) y Elliot y Cols. (34).
Leighton y Cols. (35), en una intervención de 12 meses
con 96 trabajadores de una empresa que desarrolla equipos
para la minería en Santiago de Chile, reemplazaron la alimen-
tación de la cafetería por una dieta mediterránea y realizaron
educación en nutrición para disminuir el riesgo de síndrome
metabólico. Este se diagnosticó usando los criterios estableci-
dos por la Asociación Americana del Corazón (36). Se estimó
que el consumo de la dieta mediterránea había sido exitoso y
se observaron algunos cambios signi cativos en la reducción
de la circunferencia de cintura, aumento del colesterol HDL
y una disminución de la presión arterial sistólica y diastólica.
A los 12 meses, la disminución de la tasa de síndrome me-
tabólico fue del 43%, con una incidencia de 4,1% de nuevos
casos (p=0,029) (35).
En el presente estudio, el aumento en el consumo de
frutas y verduras en la mitad de los trabajadores intervenidos,
el mayor consumo de productos lácteos descremados y el
50% que logró disminuir su consumo de bebidas gaseosas
azucaradas, es coherente con lo reportado en revisiones y
meta-análisis de intervenciones en salud laboral, que reportan
cambios modestos en la dieta de los intervenidos (7,16, 36).
Cabe destacar que la evaluación de línea base realizada a este
grupo de trabajadores fue posterior a una consulta nutricio-
nal incluida en las prestaciones del examen pre-ocupacional
periódico al que asisten los mineros, por tanto, el reporte
del consumo de alimentos al inicio de este programa, puede
haber estado in uido por el sesgo de “deseabilidad social”,
dado que los trabajadores ya habían sido educados sobre cómo
debieran alimentarse (37).
Los resultados obtenidos pueden ser atribuidos a la
combinación de las modi caciones realizadas a nivel insti-
tucional, intervención individual y grupal, lo cual también ha
obtenido resultados modestos en otros estudios y mejores que
en aquellos programas que no combinan estos elementos de
intervención (13).
Este programa, además de lograr algunos cambios en el
consumo de alimentos y en algunos indicadores bioquímicos,
fue muy bien aceptado por los trabajadores, lo cual puede
deberse a la asociación de la imagen del programa de salud con
los bene cios reportados por este grupo especí co de mineros
en la investigación formativa (24). Si bien éste puede haber
sido uno de los factores motivadores de la participación, es
necesario señalar que hubo factores limitantes, los que podrían
explicar los modestos cambios conductuales y de salud en el
grupo intervenido, como se ha visto en otras experiencias que
integran la investigación formativa y elementos del marketing
social en el diseño e implementación de los programas de
salud laboral (25-27).
Es preciso señalar que la cultura organizacional y especí-
camente la cultura alimentaria del trabajador de la minería
implican creencias, costumbres y hábitos muy arraigados, tanto
a nivel institucional como personal, presentando resistencia a
algunas de las acciones a realizar en los distintos niveles jerár-
quicos. Esto ha sido advertido por algunos autores, quienes
plantean la necesidad de diseñar intervenciones culturalmente
aceptables y políticamente factibles (24).
Uno de los factores a considerar es que el grupo a
intervenir fue de nido por la empresa, seleccionando a los
trabajadores con mayor riesgo cardiovascular, sin mediar
una inscripción voluntaria en el programa por parte de los
trabajadores, lo que puede haber in uido en su motivación.
Otro factor a tener en cuenta, es que los participantes no
siempre tuvieron las facilidades para dejar sus puestos de tra-
bajo y asistir a las actividades programadas, lo cual afectó la
exposición a la intervención. Un tercer factor a considerar es
que los cambios sugeridos a nivel de políticas institucionales
y servicio de alimentación se realizaron parcialmente y de
TABLA 3
Peso corporal, IMC e indicadores de riesgo cardiovascular en trabajadores de AngloAmerican,
pre y post intervención (promedio ± DE)
Estado Nutricional Año 2011 Año 2012
Peso (kg) 87,2 ± 14,6 86,5 ± 14,0
IMC (kg/m2) 29,7 ± 4,5 29,3 ± 4,3
Presión arterial sistólica (mm Hg) 127 ± 13,1 122 ± 14,2*
Presión arterial diastólica(mm Hg) 79 ± 8,1 78 ± 10,2
Glicemia (mg/dl) 102,1 ± 21,4 98,3 ± 25,5*
Colesterol total (mg/dl) 207, 5 ± 41,3 200,7 ± 43,3
Colesterol LDL (mg/dl) 125,9 ±32 124,9 ± 32
Colesterol HDL (mg/dl) 40,9± 7,7 43,2 ± 8,7**
Triglicéridos (mg/dl) 199,4 ± 145,8 165,5 ±125,9**
t-Student para muestras pareadas: *p<0,05 **p<0,01
DE: desviación estándar
Caichac A. y cols.
341
forma paulatina durante el desarrollo del programa, lo que
no permitió contar con el apoyo de facilitadores ambienta-
les durante la intervención. Este tipo de di cultades en la
implementación de un programa de salud laboral han sido
reportadas por la literatura y representan un desafío difícil
de enfrentar (16).
Es importante considerar que si bien en la Compañía
existen instalaciones para realizar ejercicio, esta intervención
no contempló la actividad física, por las di cultades para
realizarla durante la jornada laboral de los mineros.
En futuras investigaciones sería necesario indagar con
mayor profundidad en la cultura organizacional y variables
psicosociales mediadoras de los resultados en salud de los
trabajadores de la minería, así como estudiar los efectos de
un programa de las mismas características con participación
voluntaria.
RESUMEN
Se diseñó e implementó una intervención de 8 meses para
mejorar la alimentación de 94 mineros con factores de riesgo
cardiovascular. El diagnóstico incluyó un estudio cualitativo de
los deseos, motivaciones y barreras de los trabajadores, una
encuesta de consumo de alimentos y la revisión del aporte de
la alimentación institucional. Los datos antropométricos y bio-
químicos fueron proporcionados por la compañía minera. Con
esta base, se solicitó mejorar la oferta de alimentos saludables
y se realizó la campaña comunicacional “Minero 100% Filete”,
consejería nutricional, y talleres con las familias. Al nalizar
la intervención se observó un aumento signi cativo del con-
sumo de frutas y verduras y una disminución del consumo de
frituras, cecinas y carnes rojas. No hubo cambios signi cativos
en el IMC. Se registraron disminuciones signi cativas en la
presión arterial sistólica, glicemia, triglicéridos y un aumento
del colesterol HDL. El programa fue bien aceptado por los
trabajadores, pero se reconocen factores ambientales adversos
importantes de mejorar.
Palabras clave: factores de riesgo cardiovascular, consumo
de alimentos, investigación formativa, campaña comunica-
cional, mineros.
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Caichac A. y cols.
... In the Solari & Solari study, it was indicated that the physical state of copper workers tends to decrease, due to the lack of physical activity and overweight, which lead to Low Back Pain Syndrome (26). In association to eating disturbances, negatives changes in habits are due to Psychoso- cial Factors, such as anxiety, lack of family support and traditions, which increments the risk of cardiovascular pathologies (27). This means that, on weekends or rest days, barbeques, alcoholic drinks, fast food, and easy preparation meals are consumed frequently (28). ...
Article
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Introduction: The present article presents the results of a literature review on the health of mine workers on the Chilean copper market. Objective: To depict the evidence produced regarding the diseases that affect the health of Chilean mine workers. Method: A scoping review, indexed on scientific journals and other sources, for the 20082019 period, centered on the analysis of 20 documents that reported empirical results. Results: The main physical conditions of copper mine workers were found to be problems related to high-altitude work, the inhalation of silica dust, and noise exposure; eating and musculoskeletal disorders, cardiovascular and respiratory disorders, accidents, and low back pain. Regarding mental health conditions, the following were highlighted: psychological demands, the impact on the sleep quality due to shift work, fatigue, anxiety, depression, violence on subcontractors, and worsening of life standards after relocation, due to silicosis. Discussion: Working in copper mine impacts the global health of workers, increasing the exposure to health conditions that increases the sense of suffering and worsens their quality of life.
... The findings are similar to those of previous studies on Chilean workers, such as the study developed in 2008, which considered a sample size of 1,036 women and 709 men and showed that 60% of the sample was overweight and that more than 30% of the sample was obese (Ratner et al. 2008). Other studies on Chilean workers focusing on mining and construction workers obtained similar results: 96% of mining workers and 82% of construction workers were either overweight or obese (Caichac et al., 2013;Salinas et al., 2014). The average BMI of Chilean workers is not surprising because the recent National Health Survey (Encuesta Nacional de Salud) from 2017 showed that 39.8%, 31.2% and 3.2% of the population is overweight, obese and morbidly obese, respectively (MINSAL 2017). ...
Article
Obtaining an appropriate match between a product and its end-users requires anthropometric data, which are typically outdated and show variations among different countries. Chile had its anthropometric data taken nearly 20 years ago, thus they are probably outdated. The purpose of this paper is to describe some anthropometric characteristics of Chilean workers. An anthropometric survey involving 27 measures and five calculated body dimensions was conducted in 2016. The measurements were based on ISO 7250 and ISO 15535 to ensure the highest standards possible, and a total of 2946 workers, aged from 18 to 76 years old, participated in the survey. The results showed that Chilean workers have smaller dimensions than Dutch and US workers but have larger dimensions than South Koreans. The data presented in this paper constitute the most up-to-date anthropometric dataset describing the dimensions of Chilean workers. Practitioner summary: In Chile, women are smaller and weigh less than men, and both of these populations have high BMIs. In addition, the Chilean population exhibits substantial differences compared with other international adult populations. The data presented in this paper should be used as a reference when designing for Chilean workers.
... Algunas de ellas son las construcciones sociales sobre la identidad y actitudes del minero 1,8,9 , riesgos psicosociales específicos al tipo de trabajo 2,10 , el concepto de salud y motivaciones respecto a la salud del minero 11,12 , así como los facilitadores y barreras percibidas para el autocuidado en este grupo. 13 En este contexto, con el estado actual de la evidencia, y considerando las múltiples variables que influyen en las costumbres de alimentación y autocuidado del trabajador minero, es que este estudio se propone explorar la siguiente pregunta: ¿Cómo es la cultura alimentaria y de autocuidado de un grupo de trabajadores mineros y sus significados asociados a la alimentación? Con esta interrogante, se propone como objetivo general describir e interpretar la cultura alimentaria de un grupo de trabajadores mineros de la Faena Los Bronces. ...
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Objetivo: Describir e interpretar la cultura alimentaria de un grupo de trabajadores mineros, así como sus necesidades, intereses y percepciones respecto de su salud. Metodología: Diseño descriptivo transversal de aproximación etnográfica. Los datos se recogieron con entrevistas en profundidad y observaciones de campo. Se realizó un análisis temático con codificación deductiva y se generaron categorías que fueron agrupadas en tres áreas temáticas: identidad y trabajo del minero, cultura alimentaria y percepciones de salud. Resultados: Las características del trabajo e identidad del minero están asociadas a la capacidad de trabajar en condiciones de riesgo y cumplir un rol de proveedor familiar. La salud se asocia a la ausencia de dolencias, al adecuado desempeño laboral y bienestar general. La alimentación desempeña diversas funciones, como manejo de estrés, recreación y prevención de fatiga, asociada al imaginario familiar y al estatus social, entre otros. Conclusiones: Los resultados permiten distinguir una cultura alimentaria en el grupo de mineros que interactúa con su identidad de trabajador, lo que se plasma en las percepciones y acciones de salud dentro y fuera de la faena. Incorporar las funciones y significados atribuidos a la alimentación en la planificación de programas de prevención de fatiga y salud cardiovascular, así como la influencia del entorno alimentario, podría potenciar los resultados e impacto en la salud de los trabajadores.
... Esto ha sido señalado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), destacando la importancia de una alimentación saludable en la productividad 6 . A pesar de lo anterior, los estudios y propuestas de acción con intervenciones en alimentación y nutrición en trabajadores en general son muy escasos en nuestro país 7,8 , existiendo sólo una publicación anterior referida al sector de la construcción 9 . En el artículo anterior, de estos mismos autores, se presentó el diagnóstico de la situación de salud y nutrición, calidad de vida y condiciones laborales de los trabajadores de la construcción de una empresa en la Región Metropolitana y se comparó con la situación general de los trabajadores y de la población del país. ...
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Background: Unhealthy lifestyles and overweight are common among blue collar workers. Aim: To evaluate a nutrition education intervention in construction workers to prevent chronic diseases. Material and methods: One hundred forty two participants were randomly assigned to an experimental group (n = 69) and or a control group (n = 73). The experimental group received nutrition education consisting in individual lifestyle counseling, group workshop, group counseling in healthy lifestyles, and environmental intervention. At baseline and after one year of intervention, clinical evaluations consisting in laboratory determinations, anthropometry and nutritional assessment evaluation were carried out. Results: The experimental group experienced a significant decrease in waist circumference, total cholesterol, triglycerides, and an increase in HDL cholesterol. A significant reduction in total calorie intake, especially at the evening snack was observed during week-days. The same reduction in total calories occurred at dinner during the week-end. A significant increase was observed in the consumption of fruits, vegetables and fish. In the control group there was a significant increase in weight, waist circumference, body mass index, glucose and insulin, without changes in total calorie intake or healthy food consumption. High soft drink consumption did not change in both groups. Conclusions: In construction workers, integral nutrition intervention at the individual, group and environmental level had an impact in nutritional and biochemical indicators.
... Un estudio en trabajadores de la Región Metropolitana, atendidos por una empresa de alimentos 6 , demostró una alta prevalencia de sobrepeso (42%), obesidad (18%), hipercolesterolemia (39%), hipertensión arterial (23%) y diabetes (4%), con una subestimación en la percepción de su estado nutricional. Otro estudio en mineros con riesgo cardiovascular mostró la grave situación de salud derivada de una mala alimentación 7 . Por lo tanto, la situación de salud y nutrición en los trabajadores es preocupante, porque no sólo afecta su calidad de vida y la de sus familias, sino porque aumenta costos en salud y reduce su productividad 8 , comprometiendo el desarrollo del país. ...
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BACKGROUND The less affluent and educated members of the society tend to be less prone to healthy lifestyles. AIM To describe feeding habits, nutrition, quality of life and working conditions of construction workers comparing two recent surveys, namely the 2009 Chilean National Health Survey (NHS) and the 2010 Work, Employment and Health Survey (WEH). MATERIAL AND METHODS One hundred ninety male workers aged 43±13 years were surveyed about feeding habits during working days and weekends, smoking and usual physical activity. Weight, height and blood pressure were also measured. RESULTS In 2010, 82% of workers were overweight or obese compared with 67% rates in the NHS of 2009. The rate of sedentariness was 86% compared with 84% in the NHS of 2009 and 93% in the WEH 2010. Forty one percent smoked and those aged less than 25 years consumed more calories than the other age groups. There was a high intake of carbonated beverages, bread, salted and red meats and a low consumption of fruits, vegetables, legumes and fish. Seventy seven percent had a meal at midafternoon and only 25% ate supper. Lunch had a fixed schedule, was considered good and usually was prepared by a family member. The level of satisfaction with work, family life and life in general was high. The satisfaction with health and physical condition was lower. CONCLUSIONS The unhealthy lifestyles of these construction workers should alert health authorities.
... Un estudio en trabajadores de la Región Metropolitana, atendidos por una empresa de alimentos 6 , demostró una alta prevalencia de sobrepeso (42%), obesidad (18%), hipercolesterolemia (39%), hipertensión arterial (23%) y diabetes (4%), con una subestimación en la percepción de su estado nutricional. Otro estudio en mineros con riesgo cardiovascular mostró la grave situación de salud derivada de una mala alimentación 7 . Por lo tanto, la situación de salud y nutrición en los trabajadores es preocupante, porque no sólo afecta su calidad de vida y la de sus familias, sino porque aumenta costos en salud y reduce su productividad 8 , comprometiendo el desarrollo del país. ...
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Background: The less affluent and educated members of the society tend to be less prone to healthy lifestyles. Aim: To describe feeding habits, nutrition, quality of life and working conditions of construction workers comparing two recent surveys, namely the 2009 Chilean National Health Survey (NHS) and the 2010 Work, Employment and Health Survey (WEH). Material and Methods: One hundred ninety male workers aged 43 ± 13 years were surveyed about feeding habits during working days and weekends, smoking and usual physical activity. Weight, height and blood pressure were also measured. Results: In 2010, 82% of workers were overweight or obese compared with 67% rates in the NHS of 2009. The rate of sedentariness was 86% compared with 84% in the NHS of 2009 and 93% in the WEH 2010. Forty one percent smoked and those aged less than 25 years consumed more calories than the other age groups. There was a high intake of carbonated beverages, bread, salted and red meats and a low consumption of fruits, vegetables, legumes and fish. Seventy seven percent had a meal at midafternoon and only 25% ate supper. Lunch had a fixed schedule, was considered good and usually was prepared by a family member. The level of satisfaction with work, family life and life in general was high. The satisfaction with health and physical condition was lower. Conclusions: The unhealthy lifestyles of these construction workers should alert health authorities.
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Background Although research about the trajectory of social marketing in the Global South has recently emerged, there is still limited scientific evidence exploring the past and current state of social marketing in Latin America. Understanding how social marketing has been used broadly in Latin America can help identify areas to prioritize and further advance social marketing research in the region. Focus of the Article This article provides evidence of the evolution of social marketing in Latin America from the 1960s. It offers a better understanding of the application of social marketing in this region, and focuses on identifying challenges and applications illustrative of its evolution. Importance to the Social Marketing Field This study provides a historical overview of the evolution of social marketing in Latin America. It explores how social marketing has been applied across time to drive positive social change in this region. Relevant studies identified during this study serve as valuable information for researchers and practitioners interested in studying and applying social marketing in Latin America and similar contexts. Methods This exploratory study presents a broad overview of the body of literature with a focus on illustrative examples that depict the trajectory of social marketing in Latin America across time. Evidence in English, Spanish, and Portuguese languages were collected through diverse sources including search engines, academic databases, social marketing journals, and consultation with researchers and practitioners from the region. This search was complemented with evidence from a selection of classic social marketing books. Results The evidence collected shows that social marketing has been used in Latin America for four decades but still has not achieved its full potential. Findings show a predominant use of downstream social marketing approaches as opposed to midstream or upstream approaches. Results also show that international funding was a key element for grounding the use of social marketing in Latin America between the 1970s and 1990s but it appears to be less predominant after these decades. Recommendations for Research or Practice Further research is required to provide a more nuanced understanding of the Latin American social marketing landscape. Scholars and practitioners are invited to share experiences and further investigate conceptualizations of social marketing from their unique contexts, realities, and native languages. Limitations This study was delimited to provide a historical overview of the use of social marketing in Latin America based on a synthesis of the existing literature. A systematic approach to evidence synthesis is recommended for future studies on this topic.
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Breast-feeding rates have declined and remained low, especially in populations from low socioeconomic areas of the United Kingdom. The objective was to improve breast-feeding rates in a low socioeconomic area by using social marketing. Front-line clinical staff re-engineered the service they provided to potential breast-feeding women in their care using insights gained and skills developed with social marketing. In just three months, breast-feeding rates improved in the test community by 5% compared to controls. Using social marketing to develop a better breast-feeding product/service works effectively and quickly. Social marketing is often conflated with social advertising. This study shows that product/service development works well and that face-to-face promotion can achieve quick improvements in both outcomes and customer/staff satisfaction.
Article
Community-based prevention marketing (CBPM) combines a powerful planning framework, social marketing, with community organization principles to design behavior change programs. In southwest Florida, a coalition comprised of citrus workers and their employers, health providers, and academic researchers is using CBPM to identify occupational health issues among agricultural laborers, conduct community-based participatory research, and design culturally appropriate interventions. This article describes how this coalition was able to apply CBPM successfully to develop and implement an occupational safety program to prevent eye injuries among migrant farm workers. Lessons learned from this project and implications for designing and disseminating occupational safety programs for other agricultural workers are discussed.
Article
This study reviewed health communication and social marketing designs used in occupational safety and health interventions over the last 15 years in the United States. After an extensive literature review, 50 studies were identified that self-reported use of health communication and/or social marketing principles and practices to design occupational safety interventions. Nineteen of these studies were selected for analysis based on the following factors: the inclusion of a behavioral theory, strong study design, an intervention was conducted, and an evaluation was completed. Results indicated that all of the interventions met the criteria to be classified as a health communication intervention, but none met the complete criteria to be considered a true social marketing intervention. Limitations in the evaluation designs made it difficult to assess the impact of these interventions; however, results suggest that health communication principles have been applied widely, while social marketing techniques are poorly understood and underutilized in planning occupational safety programs.
Article
In 2003, Knowsley Primary Care Trust and Knowsley Council (Merseyside, United Kingdom) decided to take a social marketing approach to improving men's health. Predating the UK national social marketing review, the program nevertheless featured many of the key concepts and techniques that emerged in the UK national Social Marketing Centre's 2006 report It's Our Health (French and Blair-Stevens 2006). The PITSTOP program offers a number of useful lessons to the UK's emerging social marketers in public health because of its quantifiable outcomes, strategic success, and lessons learned through the development and delivery of the program.
Article
Underground mining, like many high-risk industries, is facing a crisis in the near future. This industry has traditionally relied on a master–apprentice relationship to train new workers, but experienced miners are retiring in large numbers, leaving few“masters” to properly train their replacements. With a recent resurgence in mining, many new miners are entering the workforce each day. The rise in the number of inexperienced workers has implications for worker safety in an industry in which one mistake can blow up the entire workplace. The explosion in the Darby Mine in May 2006 that killed five miners illustrates what can happen in hazardous environments such as underground mines. The Health Communications Team at the National Institute for Occupational Safety and Health Spokane Research Laboratory was asked to address this problem by developing new training and safety awareness materials to promote safe flame cutting and welding practices. This article describes how occupational ethnographic techniques provided insights needed for“new product development.” The result of this work was a national initiative to raise awareness and to protect underground coal miners from the dangers of flame cutting and welding in an environment filled with solid fuel and methane (natural gas). Although this project was initially designed for the mining industry, the approach and lessons learned are applicable to any high-risk industry and should be of interest to other social marketing or occupational safety and health professionals.
Article
This case study provides an example of how social marketing was applied to meet the needs of business customers. Federal regulations require that all companies develop a written program to track hazardous chemicals at their sites. The HazComWriter, created by the National Institute for Occupational Safety and Health (NIOSH), is a software tool designed to help companies prepare their required Hazard Communications (HazCom) written plan and list all hazardous chemicals at the company's worksite. The social marketing goal was to provide a product for small-to medium-sized companies to use for federal HazCom rule compliance. The HazComWriter is a direct NIOSH response to customer and stakeholder needs (including the Mine Safety and Health Administration, the mining community, and Occupational Safety and Health Administration- regulated companies). The identification and labeling of hazardous chemicals in the work place is an important step in protecting workers. The Mine Safety and Health Administra- tions (MSHA) Rule 30 CFR Part 47 and the Occupational Safety and Health Administration (OSHA) Rule 29 CFR 1910.1200 (also known as the HazCom rules) require all companies to develop a written program to track hazardous
Article
: To examine the longitudinal relationship between modifiable well-being risks and productivity. : A total of 19,121 employees from five employers participated in baseline and follow-up well-being assessment surveys. Multivariate regressions assessed whether changes in absenteeism, presenteeism, and job performance were associated with changes in 19 modifiable well-being risks. : Over time, a 5% reduction in total count of well-being risks was significantly associated with 0.74% decrease in absenteeism, 2.38% decrease in presenteeism, and 0.24% increase in performance. High blood pressure, recurring pain, unhealthy diet, inadequate exercise, poor emotional health, poor supervisor relationship, not utilizing strengths doing job, and organization unsupportive of well-being had greater independent contributions in explaining productivity impairment. : The often-ignored well-being risks such as work-related and financial health risks provided incremental explanation of longitudinal productivity variations beyond traditional measures of health-related risks.