Por décadas, el registro fósil de vertebrados en Chile fue exiguo, restringido a pocos hallazgos, muchos de ellos fortuitos. En contraposición a esta situación, grandes figuras de la ciencia, entre ellos Charles Darwin, Rudolph Philippi y Claude Gay, entre otros, notaron tempranamente el valor de este registro, a la vez que dieron a conocer desde el siglo XIX restos de vertebrados fósiles hallados en este exótico rincón llamado Chile. Esto no es una mera coincidencia, dado que a través de la historia geológica de nuestro planeta, Chile ha sido en forma relativamente persistente, el territorio que conformó el margen suroccidental de Pangea, luego de Gondwana, y finalmente de Sudamérica. Debido a esto, los depósitos sedimentarios que se encuentran en el país albergan evidencia fundamental para comprender la evolución de las biotas de vertebrados marinos del antiguo Panthalassa y posteriormente del Océano Pacífico. Esta evidencia es de alta relevancia para comprender los cambios experimentados por dicha fauna en este margen del planeta a través del tiempo, considerando que América del Sur fue antiguamente parte de un mega-continente, posteriormente una isla, y finalmente una gran masa escasamente conectada con Norteamérica a través un puente continental. A lo anterior se suma el “reciente” alzamiento de la Cordillera de Los Andes y la conformación de desiertos durante el Pleistoceno, lo que ha ocasionado que nuestra actual fauna de vertebrados sea bastante divergente de las formas que antiguamente habitaron Chile.
En este sentido, la presente publicación busca entregar al lector un acercamiento sintético sobre las formas de vertebrados que habitaron nuestro país durante su pasado geológico, mostrando una fauna muchas veces insospechada, la que existió en los mismos lugares comunes en donde hoy habitamos, y cuya real diversidad comienza a develarse paulatinamente en la medida que prosiguen las investigaciones sobre vertebrados fósiles. Esta publicación es una revisión general de los principales grupos animales que conforman el patrimonio paleontológico de vertebrados a nivel nacional. Cada capítulo fue realizado por especialistas nacionales e internacionales en los diferentes grupos taxonómicos en los que fue dividido este libro, y elaborado de manera tal que permita un fácil entendimiento de la distribución geográfica, temporal, y los taxa representados para cada uno de los grupos tratados.
Para algunos lectores el resultado de esta compilación será un poco asimétrica debido a que no todos los grupos tienen, por ahora, una gran representatividad en el registro fósil en Chile o, en otros, no se cuenta con todos los especialistas específicos de ciertos taxa, lo que se traduce en pocos datos sobre estos grupos animales. Es precisamente por estos ‘vacíos’ de información que la continuidad de las investigaciones sobre los vertebrados fósiles de Chile es de alta importancia.
Resulta interesante generar una retrospectiva. Desde los años 60-70’s, cuando el destacado paleontólogo argentino Rodolfo Casamiquela realizó una serie de importantes contribuciones, que no se vivía un repunte en la paleontología de vertebrados, no sólo en publicaciones, sino además, de investigadores chilenos y residentes en Chile. La investigación paleontológica en Chile se había centrado fundamentalmente en estudios estratigráficos y paleoambientales, que prefieren el estudio de fósiles numerosos, pequeños, y fáciles de recolectar, como los microfósiles (foraminíferos, palinomorfos), plantas, e invertebrados. Esto incluso llevó a una especie de mito implícito en la cultura nacional, de que “los vertebrados no sirven”. Sin embargo, no por ser más difíciles de recolectar y/o identificar, los restos de vertebrados son menos informativos para estas materias, como queda bien establecido en el presente libro. Actualmente, se ha generado una escuela de investigadores en Chile con los conocimientos de morfología y sistemática de vertebrados fósiles necesarios para determinarlos, estudiarlos, y reconocer sus implicaciones para éstas y otras áreas, incluyendo morfología, paleobiología, y evolución. Hace un par de décadas, estudiar los vertebrados fósiles siempre requería de colaboraciones con investigadores residentes en el extranjero. Otra notable diferencia está dada por el contundente impacto social que han significado los vertebrados fósiles en términos patrimoniales, museográficos, y mediáticos, un desarrollo notable que promete un “nuevo trato” para la paleontología en Chile.
Debido a que el conocimiento de los vertebrados fósiles de Chile sigue creciendo vertiginosamente, es que creemos que este proyecto no se detendrá aquí y nos veremos ciertamente en la necesidad de ir
actualizando este registro de manera de ir entregando, a la comunidad científica e interesados no académicos, datos actualizados de la historia paleontológica de Chile.
Por ahora el libro incluye el registro fósiles de peces divididos en cartilaginosos y óseos; tetrápodos basales y anfibios; reptiles, estos divididos en ictiosaurios, tortugas, plesiosaurios y arcosaurios no avianos (decidimos dejar las aves como grupos separado para facilitar la lectura); y mamíferos fósiles abordando su registro pre-Pleistocénico, Pleistocénico y mamíferos marinos agrupados en cetáceos y no cetáceos.
Llevar a cabo este trabajo no fue fácil. Aquí se reúnen décadas de investigaciones a cargo de diferentes actores del quehacer paleontológico nacional, investigaciones que gracias a la buena voluntad y colaboración de cada una de las personas involucradas, ha quedado finalmente plasmado en cada respectivo capítulo de este libro. Este minucioso trabajo de recopilación de parte de todos los especialistas ha sido finalmente aunado en la compilación de este material.
Agradecemos al Director del Museo Nacional de Historia Natural, Sr. Claudio Gómez y a la ex curadora Jefe de la misma institución, Rocío Jaña por el apoyo brindado para publicar este documento a través de la publicación ocasional del museo. Agradecemos especialmente el Editor de las publicaciones científicas del Museo Nacional de Historia Natural, Herman Núñez por su inagotable entusiasmo, apoyo y profesionalismo al trabajar en la edición general de esta publicación. También queremos extender nuestros más sinceros agradecimientos al paleontólogo Sergio Soto Acuña quien desinteresadamente apoyo el trabajo editorial y revisó minuciosamente diferentes capítulos del libro.
Esperamos que este volumen sea un estímulo para la continuación de las investigaciones sobre paleontología de vertebrados en Chile, e inspire a nuevas generaciones de profesionales a dedicarse a la paleontología de vertebrados y, en especial, a crear y conducir líneas de investigación de las que se obtenga información de grupos menos representados para conocer con más detalle la historia natural de Chile.